
La creencia popular coloca a San Lázaro como Orisha Mayor y Dios de las enfermedades.
Es fascinante cómo el sincretismo religioso en Cuba ha fusionado a los santos católicos con las deidades de la religión yoruba africana. Además de San Lázaro, en el templo también se venera a San Lázaro “el Mendigo” y a Babalú Ayé, un orisha o espíritu que cura enfermedades de la piel. Con esta dinámica, la iglesia atrae no solo a católicos, sino también a seguidores de otras religiones como la santería, que buscan bendiciones.
El santuario de San Lázaro, distante unos cuatro kilómetros al suroeste, del poblado de Santiago de las Vegas, en La Habana, Cuba, es escenario de la tradicional Procesión de los Milagros, que según cifras estimadas reúne más de 15 mil devotos cada 17 de diciembre, en una impresionante manifestación religiosa.
Dentro del Templo
La iglesia fue diseñada con tres naves, cada una con su propia entrada para acoger tanto a fieles como a visitantes. Elevada sobre el salón principal se encuentra una pequeña campana con reloj, una característica habitual de los templos cubanos. Su interior, sin embargo, presenta un estilo ecléctico con un predominante estilo barroco colonial. Otros elementos arquitectónicos distintivos son los añadidos neogóticos, neoclásicos y románticos que adornan los altares y los diseños circundantes.
Una vez dentro, durante la santa misa, se ven televisores y altavoces montados en varias columnas que proyectan la letra de cada canción para que los cantores puedan cantar a coro, lo que permite que el mensaje del sacerdote se escuche con claridad.
Una gran cúpula con una cruz se alza sobre el altar central, donde se encuentra la imagen de San Lázaro junto a otros santos venerados en Cuba, como la Virgen del Cobre y la Virgen de Regla. Finalmente, en la capilla principal, los fieles pueden visitar la venerada imagen de San Lázaro Milagroso. Dinámica religiosa
ATRIBUCIONES
La santería atribuye milagros al San Lázaro de las muletas y los perros, en alusión a una antigua creencia, pero la iglesia católica considera que ese personaje no existió nunca, aunque años tras año, miles de cubanos realizan promesas, que cumplen de forma impostergable con el fin de que los libre de enfermedades, casi siempre relacionadas con la piel y las epidemias contagiosas.
La pequeña iglesia de San Lázaro, algo así como una ermita, radicada en un pintoresco sitio de la geografía habanera, conocido como El Rincón, a unos 30 kilómetros de la capital de la isla, cuenta además con un leprosario y se dice que dos días antes de la celebración del ritual, las calles aledañas son invadidas por cientos de personas, cuyo ir y venir dificulta el tráfico de vehículos, obligando a las autoridades a implementar medidas de seguridad.
La creencia popular coloca a San Lázaro como Orisha Mayor y Dios de las viruelas, la lepra, enfermedades venéreas e infecciones de la piel y su cuerpo lleno de llagas y pústulas es un castigo por desobedecer los mandamientos sagradas.
Dueño de los secretos de la creación, otorgó al santo aché (poder, suerte, energía, fuerza) para poseer a todas las Olofi mujeres, pero este, engreído incurrió en excesos y no guardó la abstinencia obligada de cada jueves.
BABALU AYE, SAN LAZARO
Los devotos cumplen duras penitencias y muchos llegan arrastras al santuario.
Babalú Aye, nombre sincrético de San Lázaro, dejo de existir en plena juventud, pero resucitado por Olofi, a petición de Ochún y conocedor en carne propia del sufrimiento de los enfermos, se convierte en sabio curativo y misericordioso.
Los devotos tienen en gran estima a San Lázaro por su profundo amor hacia los animales y las plantas y la leyenda plantea que en África, de donde es originario, era un Dios temido y terrible, pero en Cuba devino en orisha de las curaciones.

SAINT LAZARUS AS A MOJOR ORISHA IN CUBAN POPULAR BELIEF. PHOTOS.
Popular belief places Saint Lazarus as the Great Orisha and God of illness.
The Sanctuary of Saint Lazarus, located about four kilometers southwest of the town of Santiago de las Vegas, in Havana, Cuba, is the scene of the traditional Procession of Miracles, which, according to estimates, draws more than 15,000 devotees every December 17th in an impressive religious display.
Santeria attributes miracles to Saint Lazarus of the Crutches and the Dogs, alluding to an ancient belief, but the Catholic Church believes that this figure never existed. Yet, year after year, thousands of Cubans make promises, which they keep without fail, in order to be freed from illnesses, almost always related to skin diseases and contagious epidemics.
The small church of San Lázaro, somewhat like a hermitage, located in a picturesque spot in Havana known as El Rincón, about 30 kilometers from the island’s capital, also has a leper colony. It is said that two days before the ritual, the surrounding streets are invaded by hundreds of people, whose comings and goings hamper vehicle traffic, forcing authorities to implement security measures.
Popular belief places San Lázaro as the Major Orisha and God of smallpox, leprosy, venereal diseases, and skin infections. His body, covered with sores and pustules, is a punishment for disobeying the sacred commandments.
Owner of the secrets of creation, he granted the holy aché (power, luck, energy, strength) the right to possess all the Olofi women, but the latter, conceited, indulged in excess and failed to observe the obligatory abstinence every Thursday.
BABALU AYE, SAINT LAZARO
Devotees perform harsh penances, and many arrive crawling to the sanctuary.
Babalú Aye, the syncretic name for Saint Lazarus, passed away in his youth, but resurrected by Olofi, at the request of Ochún and having experienced the suffering of the sick firsthand, he became a wise healer and merciful man.
Devotees hold Saint Lazarus in high esteem for his profound love of animals and plants. Legend has it that in Africa, where he originated, he was a feared and terrible god, but in Cuba he became the orisha of healing.

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www.TheCubanHistory.com
THE CUBAN HISTORY, HOLLYWOOD.
