AUMENTAN LOS NEGOCIOS ENTRE LA HABANA Y MIAMI.
Para Gregorio, todo es tan simple como llamar desde su celular a un familiar que reside en la Florida y encargarle una lista de circuitos y piezas para teléfonos inteligentes y computadoras.“En menos de 72 horas los tengo en mi taller. Cualquier tipo de piezas, iPhone, Motorola, Black Berry. También Hewlett Packard, Apple o Dell. Ahora llamé a mi pariente para ver si en Miami se puede comprar displays para tabletas, pues me han llegado al taller varias que presentan desperfectos en el display y no dispongo de ninguno”, relata Gregorio, dueño de un taller de reparar móviles, tabletas y ordenadores en la capital cubana.
En su pequeño negocio, por 10 cuc usted puede adquirir las últimas aplicaciones de teléfonos con sistemas operativos Android, Windows 8 y Apple. O juegos “craqueados” para Wii de Nintendo o Xbox de Microsoft.
Todo los programas y aplicaciones llegan desde la otra orilla en bolsos de las “mulas”, personas que desde hace más de 25 años se dedican al trasiego de alimentos, medicinas, ropa, calzado y electrodomésticos. Las “mulas” se han ido reinventando, a tenor con cada nueva ley promulgada por el régimen cubano o las diferentes administraciones de Washington. Son como pequeños roedores que a escondidas van devorando un enorme queso. Y vaya si lo han hecho.
Le han abierto un agujero considerable al embargo económico y financiero de Estados Unidos contra Cuba. Según Sixto, economista, es difícil de cuantificar el monto de dinero que se mueve a través del comercio ilegal: “Calculo en cerca de 3.000 millones de dólares los artículos que cada año se mueven entre la Florida y la isla mediante las mulas”.
Las exportaciones al margen de la ley traen de cabeza a funcionarios aduanales estadounidenses y de la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro.
En el Aeropuerto Internacional de La Habana, los servicios de la Aduana General inspeccionan con celo ese enorme volumen de mercaderías.
De 2012 a la fecha, el Gobierno cubano ha decretado varias normas aduaneras, en un intento por frenar la entrada de alimentos y productos industriales que nutren a los pequeños negocios privados y han menguado las ventas en las tiendas estatales por divisas.
Osvaldo es un intermediario particular, que en una vivienda deshabitada ha montado una especie de zona franca. “Un grupo de amigos nos dimos cuenta que la mayoría de los emprendimientos privados necesitaban determinados artículos para mantenerse competitivos. Hay quienes directamente contactan con parientes en Miami y les encargan piezas de autos rusos, herrajes o stocks informáticos”, dijo el hombre.
Según él, no muchos tienen esos contactos. “Entonces decidimos habilitar un almacén donde según la demanda, encargamos ropa, teléfonos, electrodomésticos, teles de plasma, ordenadores, piezas de autos y cualquier otra cosa. Los vendemos con una ligera ganancia”, agregó.
A la pregunta de cómo entran la mercancía a Cuba, Osvaldo prefiere no ofrecer detalles. Cualquier viajero a la isla conoce de primera mano los dilatados controles en los aeropuertos internacionales existentes en el país.
Según Calixto, cubanoamericano que visita su patria tres veces al año, los controles son casi una tortura. “Te hacen tres chequeos férreos a las maletas e innumerables preguntas inquisidoras. Eres afortunado si, aunque tengas los papeles en regla, en menos de hora y media puedes pasar el escaneo del equipaje”.
Conociendo el rigor aduanero, uno se pregunta de qué forma se pueden introducir en el país importaciones consideradas ilegales. Nuria, ex aduanera, intenta aclarar la ecuación.
“Es un negocio que involucra y salpica de dinero a muchos. Desde empresas del Estado que importan de Estados Unidos artículos que compran en terceros países hasta personas amparadas por el régimen que efectúan ese tipo de trasiego sin pasar por las formalidades aduanales.
Luego está el entramado de corrupción establecido entre ‘mulas’ y chequeadores de la Aduana. Es una cadena donde todos salen beneficiados. Algunos aduaneros a veces ganan en un día el salario de un año de trabajo, haciéndose los de la vista gorda.
Lo que más se cuida es que no entre propaganda enemiga, armas de fuego o drogas.Con lo otro, dólares mediante, se suele ser más laxo”, señala Nuria. El régimen es el gran beneficiario.
Excepto algunos miles de dólares que se repatrian a Estados Unidos en ciertos negocios mixtos de familia, la mayor parte del dinero se gasta en Cuba. Pero no solo es pacotilla lo que entra a granel por los aeropuertos cubanos.
En Miami o Tampa, innumerables agencias en 24 horas te entregan en tu casa -en dólares o pesos convertibles- el dinero girado por parientes y amigos. “Tienen una tasa de interés menor que las transacciones de Western Union”, dice Mario, jubilado que cada mes recibe 250 dólares de una hija residente en Hialeah.
También empresas asociadas con el gobierno, como agencias turísticas o Ezetop, un sitio digital radicado en Irlanda, ofrecen opciones de vacaciones en Varadero y otros lugares de placer, recargan teléfonos móviles, pagan facturas telefónicas y próximamente se podrá activar cuentas a familiares en Cuba con paquetes de datos de internet en el celular o en su casa.
La primavera de 2014 parece propicia para nuevas reformas económicas de carácter estructural. “En un plazo no mayor de seis meses se comenzará a devaluar al peso convertible frente al peso. Se estudia rebajarlo a una tasa de un cuc por 17 pesos. Es muy probable que antes del verano se promulgue una nueva Ley de Inversiones, autorizando a cubanos residentes en el extranjero abrir negocios en la isla.
Creo que el flujo de dinero y mercancías desde la Florida se multiplicará por tres”, señaló un experto vinculado al sector estatal.
Debido a las carencias en Cuba, el comercio entre las dos orillas ha superado y dejado atrás las actuales políticas vigentes. Está por ver si esas políticas se renuevan. O siguen empeñadas en jugar al gato que intenta cazar un ratón.
DiarioLasAmericas/Ivan Garcia Quintero, La Habana/InternetPhotos/www.thecubanhistory.com
AUMENTAN los negocios entre La Habana y Miami.
The Cuban History, Hollywood.
Arnoldo Varona, Editor
BUSINESS TRADE INCREASED BETWEEN MIAMI AND HAVANA .
For Gregory , everything is as simple as calling from your cell phone to a relative living in Florida and entrust a list of parts and circuits for smartphones and computers. “In less than 72 hours I have them in my workshop . Any parts , iPhone , Motorola, Black Berry. Also Hewlett Packard , Apple or Dell. Now called my relatives to see if Miami can buy displays for tablets , as I have come to the workshop having several flaws in the display and I do not have any , “says Gregory, owner of a mobile repair workshop , tablets and computers in the Cuban capital.
In your small business, for 10 cuc you can buy the latest mobile applications with Android, Apple and Windows 8 operating systems. Or games ” cracked ” for Nintendo Wii or Microsoft Xbox .
All programs and applications come from the other side in Bags of ” mules” , people over 25 years engaged in the transfer of food, medicine , clothing, footwear and appliances. The ” mules” have been reinvented , pursuant to each new law passed by the Cuban regime or administrations in Washington. They are like small rodents that are secretly devouring a huge cheese. And what if they have done.
We have opened a considerable economic and financial embargo hole United States against Cuba . According Sixto , an economist , is difficult to quantify the amount of money that moves through the illegal trade , ” calculator at about 3,000 billion items each year move between Florida and the island with the mules .”
Exports to outlaw head bring to U.S. Customs officials and the Office of Foreign Assets Control (OFAC ) of the Treasury Department .
International Airport in Havana , services of the General Customs inspected zeal that huge volume of goods.
From 2012 to date , the Cuban government has decreed several customs rules, in an attempt to stem the flow of food and industrial products that nurture small businesses and private sales have declined in state stores currencies.
Osvaldo is a particular intermediary , in an uninhabited house has assembled a kind of free zone . ” A group of friends we realized that most private enterprises need certain items to stay competitive. There are those who directly contact with relatives in Miami and charge them Russian car parts , computer hardware or stocks , “said the man .
According to him, not many have those contacts. ” So we decided to have a warehouse where on demand, care clothes, phones, appliances, plasma TVs , computers, car parts and anything else. The will sell with a slight gain , “he added .
When asked how come the goods to Cuba , Osvaldo prefer not provide details . Any traveler to the island knows firsthand enlarged controls in existing international airports in the country.
According Calixto , Cuban American visiting his homeland three times a year , the controls are almost torture. ” They make three checks to ferrous and countless bags probing questions . You’re lucky if even if you have the right papers , in less than half an hour and you can spend the baggage scan ” .
Knowing the customs rigor , one wonders how they can be introduced in the country as illegal imports . Nuria , customs ex, attempts to clarify the equation.
“It’s a business that involves money and splashes of many. Since state enterprises that import U.S. goods they buy in third countries to persons covered by the regime that made such transfer without going through Customs formalities.
Then there is the network of corruption established between couriers and checkers Customs. It is a chain where everyone benefits . Some customs sometimes earn in a day ‘s salary a year’s work , making the blind eye .
What really cares is that no enemy propaganda , firearms or drogas.Con the other, by dollars , are often more lax , “says Nuria . The scheme is the main beneficiary .
Except a few thousand dollars to be repatriated to the United States in certain mixed family business , most of the money is spent in Cuba . But it is not only what goes into shoddy bulk Cuban airports .
In Miami or Tampa, countless agencies in 24 hours we will deliver to your home, in dollars or convertible pesos , the money drawn by relatives and friends . “They have a lower rate of transactions that Western Union interest,” says Mario , retiree who receives $ 250 each month from a resident daughter in Hialeah.
Also companies associated with the government, as tourist agencies or Ezetop a digital site based in Ireland, offer vacation options in Varadero and other places of pleasure, recharge mobile phones, pay phone bills and soon be activated accounts with family members in Cuba Internet data packets on cell or at home .
Spring 2014 seems ripe for new economic structural reforms . “In a period not exceeding six months will begin to devalue the peso against peso convertible . We study lower it to a rate of 17 pesos per CUC . It is very likely that a new Investment Law is enacted before the summer, allowing Cubans living abroad open businesses on the island.
I think the flow of money and goods from Florida is multiplied by three , “said an expert linked to the state sector.
Due to shortages in Cuba , trade between the two sides has passed and left behind current policies in force. It remains to be seen whether these policies are renewed. O remains committed to playing cat trying to catch a mouse .
DiarioLasAmericas/Ivan Garcia Quintero, La Habana/ InternetPhotos/www.thecubanhistory.com
AUMENTAN los negocios entre La Habana y Miami.
The Cuban History, Hollywood.
Arnoldo Varona, Editor